EL REGALO DE CIRCE A MADRID
Escultura efímera de 2m de altura x 1,5m de anchura x 70cm de profundidad. Fabricada en chocolate blanco y negro, madera y cucarachas.

Hemos retomado ambos regalos míticos como metáfora de la ciudad de Madrid. La denuncia se dirige a las estrategias de marketing mediático al de cara a las olimpiadas de 2016, y que ha contribuido aún más al espejismo de ciudad- marca. Un método de limpieza de imagen superficial, que pretende dotar a Madrid de una apariencia que está muy lejos de plantear un verdadero sistema de acondicionamiento estructural y social.
De esta manera, El regalo de Circe a Madrid se presenta como una escultura de chocolate con la representativa apariencia del logotipo de Madrid 2016. Un dulce obsequio esconde una siniestra trampa. La pieza de chocolate, deberá estar constantemente iluminada por focos que al aplicarle calor, irán derritiendo la cobertura externa para dejar a la vista una estructura formada por cucarachas.
De esta manera, el espectador presencia la transformación paulatina de un atractivo y goloso regalo que invita a su cata, en un desagradable espectáculo de desvelamiento. Todo este proceso, se realizará mientras se ofrecen bombones (comestibles) al público, en una mesa situada cerca de la pieza, lo cual potencia el perfil abyecto de la pieza y la implicación empática de este.
El regalo de Circe a Madrid se constituye como una crítica al proceso actual de imagen mediática que la ciudad de Madrid está padeciendo. Bajo la apariencia de una atractiva cubierta externa, mientras los espectadores experimentamos un estado de anestesia que nos convierte en cómplices, el reclamo mediático propone un programa de simulacro. Sin embargo, la realidad se presenta muy diferente, el engaño es efímero y tras una dulce apariencia se esconde la verdadera podredumbre de su estructura.
No hay comentarios :
Publicar un comentario